Conoce todo lo que te interesará saber sobre las baterías de sodio-ión que son producidas de forma económica y sencilla, además cuentan un solo un tercio del precio que pagas por una de litio, se pueden reciclar mejor, son menos tóxicas y con un futuro muy esperanzador.

¿Qué es una batería de sodio-ión?

Es una batería recargable, producida por iones de sodio en los que se almacena su carga eléctrica.

Básicamente, son fabricadas siguiendo el proceso empleado con las de ión de litio en lo que a construcción de sus celdas y funcionamiento se refiere, pero han obtenido un gran interés académico y comercial desde la década del 2010 y hasta nuestros días.

Esto ha sido posible para cubrir la demanda de baterías en diferentes regiones del mundo con elevado impacto ambiental y donde el costo productivo de los iones de litio es alto, en comparación con las de sodio-ión.

Por otro lado, existe gran abundancia de iones de sodio, lo que permite su aprovechamiento en beneficio de la industrialización de este tipo de baterías, pero que por ahora cuentan con una baja densidad energética y pocos ciclos de carga-descarga en comparación con las de litio.

Importancia de las baterías de sodio-ión en el mundo

Las baterías de sodio-ión prácticamente han pasado desapercibidas, pero su importancia se ha impulsado desde el 2022 gracias a la presencia de CATL, su mayor fabricante, quien anunció el lanzamiento de la producción masiva de este tipo de producto para 2023.

Por otro lado, se ha conocido que la empresa CHiNa Battery Technology Co. de origen chino ha implementado una de estas baterías dentro de un coche eléctrico de pruebas, cuya especificación es de 120 Wh/kg.

Al mismo tiempo Pilotech, un fabricante de acumuladores de energía, ha certificado la utilización de baterías con iones de sodio por TÜV Rheinland; empresa proveedora de servicios técnicos y de seguridad a nivel mundial.

¿Cómo es el funcionamiento de las baterías de sodio-ión?

Estas baterías cuentan con un cátodo contentivo de sodio más un ánodo y un electrolito líquido provisto de sales de sodio disociadas en disolventes apróticos o polares próticos.

Sin extendernos en este sentido, lo cierto es que durante su carga los iones de sodio se desplazan desde el cátodo hasta el ánodo, al mismo tiempo que los electrones realizan un recorrido por el circuito externo, proceso que es generado a la inversa durante el uso o descarga.

Ventajas de este tipo de baterías

Las baterías de sodio-ión son más económicas en materia de costo productivo que las de iones de litio y su densidad energética es inferior, pero esto beneficia la seguridad en materia de suministro de energía.

Específicamente, cabe destacar que son altamente estables, se fabrican con un producto no tóxico, abundante en la naturaleza y sus ciclos de carga-descarga se encuentran entre cientos y miles.

Su eficiencia es de un 92% y se mantienen en un rango de temperatura que oscila entre -20°C y 60°C.

Actualmente están siendo comercializadas por Faradion Limited, Tiamat, HiNA Battery Technology Company, Natron Energy, Altris AB y CATL, entre otros fabricantes.

Lo importante es que las baterías de sodio-ion están demostrando ser más prometedoras comercialmente en los últimos años, lo que sin duda se debe al incremento de los costos de la materia prima imprescindible para la fabricación de baterías de iones de litio.

Al mismo tiempo, es un tipo de energía menos tóxica y contaminante, que se degrada más fácilmente que otros tipos de baterías y con lo cual representa una buena alternativa para la conservación del medio ambiente.

Finalmente, cabe destacar que el sodio es un elemento que se obtiene de forma abundante en los océanos, con lo que le están ganando la partida a las de litio-ión; específicamente en materia de sostenibilidad, asequibilidad y seguridad.